Cada movimiento cuenta:
¿Te has preguntado cómo funciona la «contabilidad» de tu cuerpo en términos de energía? Si buscas controlar tu peso o simplemente entender mejor cómo funciona tu organismo, es clave que conozcas el concepto de balance energético.
Imagina que tu cuerpo es como una balanza:
- Energía que entra: Son las calorías que obtenemos de todo lo que comes y bebes.
- Energía que sale: Son las calorías que gastas en tus actividades diarias y funciones corporales.
Si la energía que entra es igual a la que sale, tu peso se mantiene estable. Si entra más de lo que sale, ¡sube la báscula! Y si gastas más de lo que consumes, entonces bajas de peso. Así de simple, ¿verdad?

¿Dónde Va Toda esa Energía? Tu Gasto Calórico Total
Tu cuerpo usa energía todo el tiempo, ¡incluso cuando duermes! A toda la energía que gastas en un día la llamamos Gasto Energético Total Diario (GETD). Se divide en tres partes principales:
- Tu Metabolismo Basal (TMB): Tu Motor Interno
Esta es la energía que tu cuerpo necesita para funcionar, incluso en reposo absoluto. Piensa en respirar, hacer latir tu corazón o mantener tu temperatura. Es el mayor consumidor de calorías, ¡entre el 60% y 70% de tu gasto diario! Y un dato importante: a más músculo tengas, más calorías quemarás en reposo, ¡porque el músculo es un tejido muy activo!
- El Efecto Térmico de los Alimentos (ETA): La Digestión también gasta calorías
¿Sabías que tu cuerpo gasta energía solo para digerir la comida? ¡Así es! Esta parte es pequeña (alrededor del 10% de tu gasto diario), pero suma. Por ejemplo, tu cuerpo gasta más calorías al procesar proteínas que grasas o carbohidratos.
- Tu Actividad Física: ¡Muévete y gasta!
Aquí entra toda la energía que gastas al moverte. Hay dos tipos:- Ejercicio (EAT): Es la energía que gastas en actividades planificadas como ir al gimnasio, correr o hacer deporte.
- Movimiento Diario (NEAT): ¡Tu Energía Oculta!
Esta es la parte más emocionante y ¡la que puedes aumentar fácilmente! El NEAT es la energía que gastas en todas las actividades que no son ejercicio formal, comer o dormir. Cosas como:- Caminar para hacer recados.
- Subir escaleras en lugar del ascensor.
- Limpiar la casa o el jardín.
- Pasear a tu mascota.
- ¡El NEAT puede marcar una gran diferencia en tu gasto calórico total! Pequeños cambios en tu día a día pueden sumar un montón de calorías quemadas sin que apenas te des cuenta.
Entender cómo funciona tu balance energético te da el poder de tomar mejores decisiones sobre lo que comes y cómo te mueves. ¡Cada pequeña actividad cuenta para tu salud y tu bienestar!
Aún no hay comentarios, ¡añada su voz abajo!